Shigeru Ban, Premio Pritzker 2014, ha firmado un acuerdo con ONU-Habitat –la agencia de Naciones Unidas encargada de promover asentamientos humanos sostenibles– para diseñar 20.000 nuevas viviendas en el campo de refugiados de Kalobeyei en Kenia. En la actualidad ya viven más de 37.000 personas y se proyecta que su capacidad original de 45.000 será largamente sobrepasada, considerando que en este año han arribado más de 17.000 personas.
"La clave será diseñar y construir un refugio que no requiera supervisión técnica; usar materiales que estén disponibles localmente; y amigable con el medio ambiente. Es importante que las casas puedan ser mantenidas fácilmente por sus residentes", dice Shigeru Ban.
La trayectoria de Ban se destaca por un gran interés en la arquitectura humanitaria y de emergencia, incluyendo más de una docena de proyectos para refugiados en todo el mundo —incluyendo Ruanda, Italia y Nepal—, usando materiales poco convencionales como cartón y tubos de papel.
En una reciente visita al campo de refugiados de Kalobeyei, el arquitecto japonés explicó la importancia de inspirarse en las tradiciones de construcción local para proporcionar espacios que se adapten a su entorno. "El diseño tiene que cumplir con las normativas habitacionales del país, y responder responsablemente a las condiciones climáticas locales, proporcionando soluciones sustentables replicables".
Yuka Tereda, Coordinador de Proyecto de ONU-Habitat, agregó. "Nuestros enfoques son fuertemente participativos y [tanto] los oficiales del lugar, como los representantes de la comunidad de refugiados y de acogida, tendrán un aporte en el proceso de diseño".
El diseño del equipo de Shigeru Ban será testeado en 20 casos. Si funcionan, los prototipos reemplazarán gradualmente las actuales estructuras, muchas de las cuales han comenzado a desgastarse.
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